Los niños y adolescentes albergados por la Fundación “Casa Hogar Al Fin” celebraron junto a la Junta Directiva de la Industria Procesadora de Cereales (Inproceca), quienes se reunieron para disfrutar de las festividades navideñas con actividades y juguetes. Asimismo, esta empresa regaló un espectacular día lleno de diversión, con la entrega adicional de donativos económicos para la óptima ejecución de sus proyectos.

Mauro Libi Crestani

Así lo dio a conocer el presidente de esta reconocida compañía y fundador de esta organización sin fines de lucro, [Mauro Libi Crestani], quien explicó que “la búsqueda es brindar una mano amiga porque nos motiva y nos humaniza el hecho de compartir con estos niños y jóvenes que requieren de apoyo, con el objeto de colaborar con su desarrollo integral para que sean futuros y espléndidos profesionales y puedan formar el día de mañana una armónica familia”.

Inproceca dedicó un día entero a los 27 varones que alberga esta ONG, quienes jugaron y compartieron con sus nuevos obsequios, y además se beneficiarán de todas las iniciativas que esta compañía ofrece respaldar, como parte de sus acciones de Responsabilidad Social Empresarial. Con su apoyo, la fundación logra cubrir hasta el 90% de sus gastos para continuar llevando a cabo sus programas de atención y formación fungiendo como hogar sustituto de estos infantes.

Mauro Libi CrestaniCon la colaboración de este tipo de empresas, la Fundación “Casa Hogar Al Fin” puede:

  • Asistir emocional, material, social, pediátrica, nutricional, psicológica, legal, educativa y recreativamente a toda la población infantil que habita en el hogar.
  • Brindarle atención alimentaria y formación para desarrollar y potenciar los talentos físicos, emocionales e intelectuales de los niños durante su estadía.
  • Facilitar la reinserción social del niño a un medio familiar estable y acogedor, priorizando su entorno biológico, el cual será orientado y educado para lograr una armonía en todos los ámbitos de la vida común.